jueves, 29 de diciembre de 2011

La Chunga

No entiendo mucho las tendencias de cada temporada. No me explico por qué de repente los zapatos de punta hasta ahora propios de choni serán el hit elegante del próximo año o cómo Prada va a conseguir convencerme este año para que me compre por 2000 euros unas botas iguales a unas que me compré hace cinco años en el Lefties para disfrazarme de Boney M. Sí, lo sé, pero es que no lo entiendo. Tampoco conozco muchos diseñadores famosos. Estoy segura de que cuando Celia publica un post sobre una preciosa colección, los vestidos que escojo como mis preferidos son los más convencionales, los menos innovadores... los únicos que entrarían en mi armario.

Sin embargo, a mí me gusta la ropa, aunque no entienda de moda. Sé que suena frívolo, pero para mí la ropa es una forma más de expresar mi estado de ánimo, como mi tono de voz o mi sonrisa, y por ello tengo una relación muy especial con mi vestidor. Y creo que independientemente de cualquier moda, la gente está más guapa cuando lleva algo que les hace sentirse a gusto y les permite expresar lo que son con tranquilidad. Y eso es distinto en cada persona, que hay gente elegante en pantalón de pijama y gente estrafalaria en un Armani. Por eso a mí me hace sentir tranquila esa camiseta que me pongo y me recuerdo paseando por Vigo al frío solecillo del principio de la primavera. O la falda que llevaba aquel día extraño en que todo se complicó un poco en Lavapies siempre me pone un poco melancólica. 
Para mí lo que uno se pone es una decisión muy personal. Incluso si decide que su aspecto exterior importa poco, eso es muy personal, es una expresion intransferible de su personalidad. Y por tanto creo que las tendencias deberían ser reinterpretadas para que se adapten a quien eres aunque las tiendas low-cost nos lo pongan tan difícil vendiéndonos todas lo mismo, queriendo uniformarnos a todos; y aunque esto no explique algunos cadáveres de mi armario como las Hunter verde musgo o el sombrero de paja, que sí, que están ahí como los fantasmas de las temporadas pasadas, pero que nunca encuentran su momento.
 
Y sin embargo, ahora me contradigo a mí misma porque he encontrado una inspiración externa. Ahora sigo con devoción a la it girl británica Alexa Chung. Y sí, lo sé, la Chung es una chunga, superficial y seguramente no tendríamos nada de qué hablar, pero me encanta su forma de vestir. Lo que su ropa dice me suena bien. Y mi último plagio de su estilo es el abrigo de leopardo  que se compró en el 2008 y con el que ha salido de fiesta este invierno.



Que si no lo llevase ella nunca lo habría comprado, lo sé, pero así de fuerte es la influencia, que cuando llegué a TopShop y lo vi, de repente, sin saber ni lo que estaba haciendo porque yo iba a comprar unos guantes y un gorro porque en Madrid hacía un frío que pelaba, me lo estaba probando y al segundo pagándolo, y todo inconscientemente, sin entender por qué estaba pasando lo que estaba pasando, sin reflexionar sobre si de vuelta a mi vida real tendría el valor de ponérmelo. 
 
Porque ya sabéis lo que decía Groucho Marx: "Estos son mis principios, y si no te gustan, tengo otros".

miércoles, 28 de diciembre de 2011

Justin Timberlake y FreeSol

La Navidad es la época de los buenos deseos. Y en el pulgar, cuando juntamos las palabras "buenos" y "deseos" en la misma frase, siempre nos viene a la cabeza Justin Timberlake. Como ya no se deja ver mucho en vídeos propios, tenemos que conformarnos con sus colaboraciones en los vídeos de sus protegidos FreeSol, como éste de la canción "Fascinated", donde nos honra con su increible presencia en el estribillo.

Aquí os lo dejo, con mis mejores deseos.

domingo, 25 de diciembre de 2011

Mi mejor momento en el cine del 2011: "La boda de mi mejor amiga"

Todavía no hemos sobreescrito todas nuestras viejas tradiciones con costumbres americanas, por suerte. Y sin embargo todo lo yanqui nos es tan familiar por las series y las películas, que aún esperamos que alguien detenga nuestra boda cuando el cura dice eso de "quien tenga algo que decir, que hable ahora o calle para siempre", que nuestro abogado gane nuestro caso imposible por una sentencia similar ocurrida en Cuenca hace diez años, o que nos lean nuestros derechos cuando nos esposan, un policía con gafas de espejo.

Aquí la madrina de tu boda, tu suegra, tampoco te organiza la despedida de soltera. Que puede haber casos ¿eh? pero yo personalmente no me imagino a la madre de mi novio organizándome el viaje a Ibiza con mis amigas enloquecidas o contratándome a los strippers vestidos de El Zorro, una fijación personal. Tampoco me imagino a mis mejores amigas poniéndose de acuerdo para llevar el mismo vestido. Es totalmente imposible que a mí me convenzan para que lleve el mismo vestido que a mi amiga la buenorra le va a quedar estupendo. Que no hay que jugar, que la autoestima no crece debajo de las piedras.



Así que "La boda de mi mejor amiga" tiene un contexto que aquí nos es un poco extraño. Pero sin embargo lo que cuenta hace que me sea cercana. Me gusta cómo cuenta la amistad sincera entre dos chicas, cómo describe a esa amiga que todas tenemos desde siempre, que te conoce como eres y te justifica las estupideces más grandes, que hasta parece que no se da cuenta de cuánto llegas a liarla a veces. Y también cómo cuenta la competitividad, ese rencor a esa mujer guapísima y que todo lo hace bien que un buen día parece estar en todas partes para hacerte sentir un poco peor, y que sólo tú pareces darte cuenta de sus crueles reales intenciones (Sí, que es envidia, lo sé). Y también cómo cuenta que a veces las personas más distintas a ti son tu mejor consuelo en los momentos más complicados. Y también cómo cuenta cómo mujeres increibles podemos colgarnos del sufrimiento que nos causan tíos que no se merecerían ni una segunda mirada nuestra (Bueno, que en este caso es Don Draper, que ojalá todos mis errores vitales tuviesen esa pinta). Y cómo cuenta que el amor de tu vida no se suele parecer a Don Draper, y suele aparecer con su barriguita cervecera en el momento más inoportuno de tu vida de la manera más absurda. Y también cómo cuenta lo difícil que es renunciar al sueño de tu vida por esta oscura crisis económica, y lo duro que se hace ir a trabajar cada día sabiendo que tendrías que estar haciendo otra cosa.

No sólo es por lo que me reí las dos veces que la vi en una semana por lo que es mi mejor momento en el cine del 2011. Esta película me enganchó. Quise que aquel grupo salvaje fuesen mis amigas. Y eso que yo sé que tengo unas amigas maravillosas. Por eso a lo mejor, me identifiqué tanto.

jueves, 22 de diciembre de 2011

Henry Lee

Esta época tan tierna y familiar me inspira el seguir hablando de crímenes famosos. Extraño.

El australiano Nick Cave también es un seguidor de los crímenes famosos. En 1996 publicó junto a su banda The Black Seeds el disco "Murder Ballads", compuesto en su totalidad por canciones sobre asesinatos.

Os incluyo una de mis canciones preferidas de este disco, "Henry Lee", que cantó con la que entonces era su pareja y ahora archienemiga, PJ Harvey. La canción está dedicada al asesino en serie americano Henry Lee Lucas, un ser tan cruel que cuando busqué su historia tras escuchar el disco tuve nauseas. Aun recordarla me pone mal cuerpo. Sin embargo Nick Cave utiliza la atormentada personalidad de Henry Lee para crear una canción frágil, triste y desgarradora sobre un amor imposible, que en el genio de Cave y Harvey resulta de una ternura turbadora. 



Mañana prometo recuperar el espíritu navideño.

martes, 20 de diciembre de 2011

Edgar Allan Poe y el Misterio de la bella cigarrera

Seguramente sea la persona más asustadiza de mi mundo. Por ello no veo pelis de miedo, ni con asesinos en serie ni con fantasmas, y si mi hermano me engaña como cuando fuimos a ver "The ring" no duermo en días.  Y eso que era la versión americana, porque con la versión japonesa sólo viendo la carátula del dvd pasé una noche sin dormir. Y cuando vi "Funny games" en versión original no pude en bastante tiempo escuchar hablar ingles sin que me diesen escalofríos. Y porque era otro remake americano (odio a Naomi Watts), que la versión alemana me habría matado directamente, que los alemanes ya me dan miedito hasta de buen rollo. Pero no sólo es en las películas. En la vida real también soy una cobardica. Mis amigas aun se ríen de todos mis complicados protocolos de seguridad cuando me quedaba sola en mi casa, los números de teléfono medio marcados, las armas bajo la almohada... Que en esas noches de insomnio me acostumbré a escuchar "Y si amanece nos vamos", algo bueno que saqué.

Lo curioso es que aun siendo así, me fascinan los crímenes famosos. Los estudio, los analizo, turro a mis cercanos con mis complicadas hipótesis para su resolución. Pero no me gustan los que salen en programas cutres de La Sexta, los chapuceros e imperfectos. Yo los crimenes los prefiero perfectos y con un toque clásico. Así que hoy quiero compartir con vosotros mi oscura pasión y recomendaros un libro que a mi me recomendó mi hermano "Edgar Allan Poe y el misterio de la bella cigarrera: La investigación de la atroz muerte de Mary Rogers" de Daniel Stashower. 



El libro entremezcla la vida y muerte de la hermosa neoyorquina con la vida y muerte del escritor de genio oscuro, sobre el fondo de una sucia y decadente Nueva York. Podreis saber cómo fue asesinada Mary Rogers, cómo vivió y cómo escribió Edgar allan poe, cómo nació en la prensa ese apetito amarillo por las miserias de los otros, cuándo Nueva York empezó a madurar. Y lo de menos es demostrar si Edgar Allan Poe mató a la Bella cigarrera o sólo le interesaba la historia por motivaciones lucrativas. Sí, eso es lo de menos. Lo de menos, dice...

Pues a mí no me parece lo de menos. Pero que sí que fue él. Mirad las pruebas, que está claro. Aisssssssss, por favor, leed el libro que necesito compartir mi complicada teoría con alguien :-)

domingo, 18 de diciembre de 2011

Cesaria Evora

Ayer murió esta estupenda cantante de Cabo Verde a los 70 años de edad; y como pequeño homenaje, una canción.

viernes, 16 de diciembre de 2011

Christian Göran, o el encanto de los hoteles baratos

Será porque a las modernillas nos gustan los tíos con barba. O será porque lo único que echo en falta de tener tele es el anuncio de Trivago. Aquí os subo unas fotillos de Christian Göran, para mí, el chico del 2011. 






jueves, 15 de diciembre de 2011

Canciones que me ponen de buen humor

Cuando no tengo mi mejor semana, sólo algunas canciones me ayudan a sentirme mejor. Algunas desde hace muchos años. No tienen por qué ser las canciones más alegres, ni mucho menos. Como la historia que os conté del "Berlin" de Lou Reed, que me hacía sentirme mejor por un desolado compañerismo. Hoy os pego una de mis canciones preferidas cuando me pongo triste. Sin entrar en más detalles de por qué la pego. A quien pueda interesar.

martes, 13 de diciembre de 2011

Un tango

 Llevo un par de días con esta canción de Rodrigo Leão en la cabeza, así que la comparto.


miércoles, 7 de diciembre de 2011

Sugar Pot Candy Store

   Desde hace unos días existe en Vigo la mejor tienda de chuches del mundo. Se llama Sugar Pot Candy Store y esta en la calle Ecuador 32. Natalia e Iria son las dueñas y estaran encantadas de atenderos y llenar vuestras bolsas de caramelos
 Podreis encontrar golosinas para todos los gustos y regalos muy dulces para estas navidades.
Me gusta mucho la idea de encontrar todas las gominolas y caramelos en botes.
 Y fijaos que arbol de navidad más original les hizo Tía Nuna!
Si estais, o pasais por Vigo no dejeis de visitarla.